Van pasando los días de verano y empezamos a toparnos con las colecciones de otoño en los escaparates de las tiendas, comienzan a deslumbrarnos sus colores apagados, sus tonos marfil y los térreos en los zapatos y en los pantalones, nos vamos empezando a concienciar de que dentro de nada las blazers comenzarán a salir de su olvido, que las noches frescas comienzan a hacer acto de presencia y que ya no sólo nos basta con una camisa de manga larga, el frío de estos primero días de agosto nos hace mirar con anhelo la ropa que comienzan a meternos por los ojos y que comenzamos a desear con bastante fruición.
Pero aún nos queda verano por disfrutar, aún podemos pensar en esos días de playa y en esas bebidas refrescantes sostenidas por nuestros dedos, no nos dejemos engañar por esas frescas mañanas ni por las noches heladoras, aún nos queda mucho para el otoño y no debemos dejarnos llevar por nuestras sensaciones.
Seguimos pudiendo disfrutar de unos pantalones cortos, de las camisetas de hombreras y de los sombreros de rafia, podemos reír a los pies de una toalla junto con nuestros amigos mientras el sol acaricia nuestra piel y el aire ondea nuestro pelo.
Sonreíd al poco verano que nos queda por delante, disfrutad de cada pequeño rayo de sol que aparezca entre las nubes, sentid la arena de la playa entre los dedos de vuestros pies y recordad cómo las olas lamían vuestros tobillos. Es verano, no nos dejemos llevar por las nuevas colecciones, no soñéis con los abrigos ni con los jerséis que os pondréis este otoño, disfrutad cada momento y vivid cada segundo.
"Despierta talla 38"
Nigel
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